
Época de Micael.
Escuchamos el relato “El Reino de la Fortaleza” en el cual el Príncipe Mario, al cumplir años, pudo entrar en la Sala de Piedra donde se encontraban dos espejos en los que pudo mirarse y conocerse, transformándose en un gran Rey.
Invitamos a los niños a que en cada atardecer puedan mirarse en su espejo del alma y descubrirse en gestos nobles como también en los no tan nobles, para así transformarse en reyes y reinas y encontrar el equilibrio de la balanza del alma.
Época de escritura.
A lo largo de la época los relatos nos fueron adentrando en la historia de la escritura desde sus comienzos frente a la necesidad de los seres humanos por comunicarse y expresarse, al igual que un niño recién nacido que primero balbucea y luego nombra las cosas.
Comenzamos creando nuestras propias pinturas para luego escribir con pluma de ave, con plumín y finalmente con la tan esperada lapicera.