
Nuestros hermosos jóvenes comienzan su último año y lo celebramos con un arco de flores y un puentecito de manos para rememorar el portalito del jardín de infantes y el arco de inicio de primaria, en un gesto profundo y emotivo.
Bendiciones para este tramo final de la escolaridad. Que sigan siempre los aprendizajes, que las flores den frutos, que los frutos maduren y que cada uno comience a vislumbrar su camino.
Deseamos que florezca lo que hemos cultivado con esmero en la escuela en su primer septenio a través de una profunda y volitiva imitación, a través de una imaginación bien cultivada a través de sus amadas maestras en su segundo septenio y una construcción del juicio en la secundaria, cultivando su amor por la humanidad durante su tercer septenio. Confiamos que este trabajo hará florecer todo lo que traen a esta vida para entregar como dones y talentos a este mundo desde su verdadera esencia, y así transformarlo en un lugar mejor. El comienzo de este forecimiento se dará a través de su trabajo anual. ¡Buen trabajo!
Maestras Florencia y Rocío

