
De la mano de un cuento que sucede en las montañas, acompañando la vida y los sueños de un pastorcito de 7 años llamado Nehuén, llegaron las flautas al primer grado. Para coronar el hermoso y delicado proceso de las dos primeras semanas de trabajo con los instrumentos, los padrinos y madrinas de séptimo grado se acercaron al aula de primero y juntos, hicimos música, acompañados por el maestro Diego y sus divertidas ocurrencias.
Con la primavera, el aula se llenó de los trinos más dulces y tiernos de las flautas.
Y las maestras, agradecidas.
Florencia y Luciana

