
El 24 de Junio, el día de San Juan, la escuela amanece desierta. ¿Desierta? ¡Miremos mejor! Allí están los sombreritos de los enanos preparados para la fiesta de los farolitos, y el hada azul escondida en el lirio violeta del parque pequeño de primaria, y Tomten escondido atrás del diente de león.
La escuela nos espera. Pero no está sola. No está desierta. Está llena de vida. Llena del amor de los seres de la Naturaleza que la cuidan hasta nuestro regreso.
Gracias Maestro Gustavo por las hermosas fotos.